El dirigente de San Lorenzo tiene una restricción de 300 metros por una causa por violencia de género que tramita en una fiscalía de Ezeiza.
Este miércoles, Lucila Cassiau, expareja de Néstor Ortigoza, brindó un estremecedor testimonio, revelando las agresiones que sufrió por parte del exfutbolista y actual dirigente de San Lorenzo.
En diálogo con el noticiero Mediodía Noticias, por El Trece, la ex mujer del futbolista contó: “Tengo el botón antipánico y una medida de restricción perimetral de seis meses. Él violó la restricción perimetral. Hubo una situación que ya la denunciamos. No le interesa (cumplirla) porque es una persona que no acata una orden”.
“Tengo miedo, me apuñalaron las ruedas del auto. El otro día salí y encontré una puñalada en el vehículo. El miedo es real, está acá”, confesó la mujer, visiblemente angustiada. “Estoy pasando el peor momento de mi vida, me siento muerta en vida, no tienen idea de lo que estoy sufriendo”, continuó.
Lucila Cassiau reveló que Ortigoza tiene problemas con el consumo de drogas. “Que vaya a un tratamiento, que se cure, que priorice a los hijos. Que deje de arruinar la vida a sus cuatro hijos”, continuó
Ortigoza tiene una orden de restricción de 300 metros que le impide circular o acercarse al domicilio donde reside la víctima con su hijo. La medida se había efectivizado el mes pasado, cuando se difundieron una serie de videos que mostraban la presunta agresión que el dirigente de San Lorenzo ejercía sobre su ex.
La mujer describió que la violencia comenzó hace 13 años, cuando estaba embarazada de su hijo mayor: “Esto es de siempre. Aparte del daño físico, está el daño psicológico. Me arruinó la cabeza”.